Despedida a José Alberto «Pepe» Mujica: Un Legado Inolvidable
Un Último Adiós en Montevideo
La ciudad de Montevideo se detuvo para rendir homenaje a José Alberto “Pepe” Mujica, el expresidente uruguayo y destacado líder de la izquierda latinoamericana, quien falleció el martes 13 de octubre a los 89 años debido a un cáncer de esófago. Desde los balcones de sus hogares, vecinos observaban con respeto mientras militantes adornados con banderas llenaban las calles. La atmósfera era inusualmente silenciosa para un día laborable en esta vibrante capital.
Al día siguiente,una multitud se congregó frente a la Plaza Independencia para participar en el cortejo fúnebre que llevaría los restos del exmandatario al velorio en el Palacio Ejecutivo. A las 9:40 horas,una comitiva gubernamental liderada por el presidente Yamandú Orsi recibió el féretro,que fue transportado en una cureña tirada por caballos del Ejército.
Recorrido Emblemático y Conexión Popular
Durante más de tres horas,el cortejo recorrió lugares emblemáticos como la Universidad de la República y la sede del Movimiento de Participación Popular (MPP),partido fundado y dirigido por Mujica hasta su muerte. A lo largo del trayecto, aplausos y cánticos resonaron entre los asistentes que marchaban lentamente bajo un sol abrasador propio del verano.
En Uruguay es común ver a líderes políticos mezclarse con la ciudadanía sin excesiva seguridad ni protocolo; así lo hizo Orsi al caminar varios kilómetros entre sus compatriotas junto a su esposa Laura Alonsopérez y su equipo ministerial. En un momento emotivo, un vecino se acercó llorando discretamente para expresar su pesar; aunque no derramó lágrimas visibles, dejó una huella emocional en el presidente.
Lucía Topolansky, viuda de Mujica y compañera política durante más de cuatro décadas, siguió firme todo el recorrido desde su vehículo. Su mirada reflejaba tristeza pero también fortaleza ante este último adiós.
Homenaje Nacional e internacional
Aproximadamente a las 13:15 horas,las banderas ondearon a media asta en el Palacio Legislativo recibiendo los restos mortales del exmandatario e iniciando un funeral abierto al público que continuará hasta la tarde del jueves 15. Se espera la llegada de dignatarios internacionales como Luiz inácio Lula da Silva (presidente brasileño) y Gabriel Boric Font (presidente chileno).
El Salón de los Pasos Perdidos fue testigo del encuentro entre miles que acudieron para rendir tributo al líder tupamaro. Junto al féretro estaban amigos cercanos así como figuras políticas opositoras como Julio María Sanguinetti y Luis Lacalle Pou. Este último expresó: “me quedo con lo positivo”, resaltando cómo Mujica logró conectar con todos independientemente de diferencias ideológicas.
Orsi recordó momentos significativos compartidos con él e hizo hincapié en cómo encarnaba valores fundamentales uruguayos: “En este país donde se cultiva que nadie es más que nadie, él lo representó maravillosamente”.
Sobre su ataúd reposaban dos banderas significativas: El Pabellón Nacional y la Bandera Artiguista; siguiendo uno de sus últimos deseos antes fallecer no se incluyeron insignias partidarias. Tras concluir las ceremonias públicas será trasladado al cementerio donde tendrá lugar una cremación privada e íntima según otro deseo especial: descansar junto a Manuela,su perra fiel.
José «Pepe» mujica deja tras sí un legado político único marcado por valores humanos profundos; incluso después de partir sigue siendo recordado como un hombre auténtico hasta sus últimos días.