La Casa Blanca se Prepara para un Nuevo Salón de Baile: Un Proyecto Controversial
El futuro salón de baile en la Casa Blanca representa el último paso en una serie de decisiones tomadas por el actual presidente, Donald Trump, con el fin de dejar su impronta personal en la residencia presidencial. Desde su llegada al poder, Trump ha implementado cambios significativos, comenzando por la ornamentación dorada de la emblemática Oficina Oval. Posteriormente,erigió mástiles con enormes banderas estadounidenses en los jardines Norte y Sur y desmanteló los rosales históricos de la Rosaleda del ala Oeste para transformarlos en un patio empedrado. Ahora, planea añadir un lujoso salón que ha suscitado diversas críticas.
Un Legado Ambicioso
“Siempre he afirmado que era necesario contar con un salón de baile”, declaró Trump a los medios durante una reciente conferencia en la Casa Blanca. “Este será un gran proyecto legado y creo que tendrá características especiales”.
Los diseños preliminares compartidos por la administración muestran una sala inspirada en el estilo Luis XIV, similar a las estancias del resort Mar-a-Lago del presidente. El espacio contará con suelos de mármol pulido, columnas neoclásicas adornadas con dorados y candelabros elaborados.
La portavoz presidencial anunció que las obras comenzarán este septiembre y se espera que culminen con un área total de 8,000 metros cuadrados capaz de albergar hasta 650 personas. El costo estimado es de 200 millones de dólares; financiamiento que provendrá tanto del propio Trump como también donaciones privadas realizadas por “patriotas”, aunque sus identidades aún no han sido reveladas.
Una Necesidad Histórica
“Durante más de 150 años, presidentes y administraciones han deseado contar con una gran sala para recepciones”, comentó Karoline Leavitt. Este nuevo espacio tiene como objetivo acoger eventos importantes como cenas oficiales para líderes extranjeros; actualmente estos banquetes se llevan a cabo en estructuras temporales instaladas en los jardines.
El diseño del nuevo salón será blanco e incluirá columnas imponentes junto a una fachada reminiscentemente similar a la entrada principal del edificio histórico. Se ubicará donde actualmente está situada el ala Este —tradicionalmente reservada para las oficinas personales de la primera dama— pero estará “sustancialmente separado” del edificio principal según lo indicado por fuentes gubernamentales.
La constructora Clark Company será responsable del proyecto; esta firma tiene experiencia previa trabajando en emblemáticos desarrollos dentro Washington D.C., incluyendo el Capital One arena y L’Enfant Plaza. La planificación arquitectónica fue encargada al estudio McCrery Architects quien asegurará mantener intacto el estilo neoclásico estadounidense característico.
Críticas Ante Donaciones Privadas
Es importante señalar que financiar este ambicioso proyecto mediante donaciones privadas ha generado inquietudes entre miembros opositores demócratas quienes advierten sobre posibles conflictos éticos relacionados al uso indebido o influencia externa sobre fondos públicos destinados a obras gubernamentales. El congresista Mark Pocan expresó sus preocupaciones ante NBC: “Esta es una obra considerable que debería ser presentada ante el comité correspondiente encargado aprobar gastos estatales”. Además cuestionó si esto podría llevar a situaciones donde marcas específicas patrocinen espacios dentro del recinto presidencial.
La elección temporal para anunciar esta iniciativa también ha sorprendido a muchos observadores políticos; justo antes había criticado abiertamente los costos excesivos asociados al presupuesto reformador actual superando ya los 2 mil quinientos millones dólares —un incremento notable respecto al presupuesto inicial— durante su visita reciente a las instalaciones centrales Reserva Federal.
mientras avanza este plan hacia su materialización programada para septiembre próximo bajo circunstancias controvertidas tanto financieras como políticas queda claro que Donald Trump busca dejar huella indeleble durante su mandato presidencial.