Optimización del Gasto en Salud: Nuevas Medidas del Gobierno Argentino
Estrategias para Reducir Costos en el Sector Salud
En los últimos meses, el gobierno argentino ha centrado sus esfuerzos en la optimización del gasto en salud. Esta estrategia implica reducir al máximo los gastos, aunque a veces esto conlleve efectos secundarios no deseados que luego deben ser abordados. Las medidas adoptadas incluyen desde modificaciones en la adquisición de medicamentos por parte del Estado hasta la eliminación de la triangulación de aportes de seguridad social, identificando así diversas áreas donde se pierden recursos. Recientemente, se ha añadido un nuevo componente a esta estrategia.
La reciente decisión se produce menos de una semana después de que el Ministerio de Salud alcanzara un acuerdo con las empresas prestadoras de servicios médicos privados para mantener estables los costos sanitarios. Este compromiso surge tras la reciente disminución del dólar tras la eliminación del cepo cambiario y busca que los aumentos en las cuotas pagadas por los afiliados no superen el índice inflacionario. Esta fue una táctica persuasiva que llevó a muchas compañías a ajustar sus precios hacia abajo.
Nueva Regulación sobre Productos Médicos
Una nueva normativa emitida por la ANMAT (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica) tiene como objetivo no solo cumplir con este compromiso sino también intensificarlo al reducir aún más los costos asociados a productos médicos. A partir de ahora, estos productos —que representan aproximadamente el 30% del gasto total en clínicas y hospitales— podrán ser importados con un plazo máximo de caducidad reducido a seis meses; anteriormente, este periodo era mínimo un año.
Fuentes oficiales explicaron que esta medida busca «ampliar la oferta», lo cual debería traducirse en una disminución generalizada de precios según las leyes económicas actuales. Es importante destacar que esta regulación aplica exclusivamente para productos médicos y no incluye medicamentos o especialidades farmacéuticas.
La ANMAT define un producto médico como cualquier equipo o material destinado al cuidado sanitario —incluyendo dispositivos utilizados para diagnóstico o tratamiento— siempre y cuando su función principal no dependa directamente de medios farmacológicos o metabólicos.
El ministro Mario Lugones continúa implementando su plan para optimizar costos dentro del sistema sanitario nacional. En esta categoría entran numerosos dispositivos esenciales para atender pacientes: desde catéteres hasta prótesis e insumos quirúrgicos diversos.
Evaluación Crítica sobre las nuevas Normas
Oscar Mendiz, jefe del Servicio de cardiología Intervencionista en Fundación Favaloro, compartió su perspectiva sobre estas nuevas regulaciones durante una entrevista con Clarín. Según él, “para ciertos productos muy consumidos y cuyo uso es predecible”, como materiales contrastantes utilizados frecuentemente, estas medidas pueden resultar beneficiosas si logran abaratar costos.
Sin embargo, Mendiz también advirtió sobre posibles inconvenientes: “Para dispositivos cuya demanda varía considerablemente —como stents coronarios— o aquellos usados raramente por hospitales específicos”, podría ser contraproducente debido al riesgo elevado asociado al desperdicio generado por fechas límite más cortas; lo barato podría terminar saliendo caro si hay exceso stock sin rotación adecuada.Fernando Coppolillo, director general consultora Managed Medical Care especializada en asesoramiento a obras sociales y prepagas afirmó que estas estrategias son útiles e ilustró su punto recordando experiencias pasadas exitosas donde diferentes entidades colaboraron eficientemente para adquirir insumos críticos mediante licitaciones internacionales competitivas.
Esta nueva disposición reemplaza una normativa anterior establecida desde 1999 que requería plazos mínimos más largos antes mencionados; sin embargo ahora se busca facilitar tanto el acceso como mejorar condiciones económicas dentro toda cadena productiva relacionada con estos insumos médicos esenciales.
Finalmente cabe mencionar que algunos artículos específicos seguirán bajo regulaciones previas respecto a su vida útil aprobada por organismos competentes; además aquellos destinados únicamente a uso único mantendrán restricciones similares respecto reesterilización u alteraciones originales antes mencionadas.