Pablo Otero: El «Señor del Tabaco» Enfrenta Nuevas Acusaciones de Lavado de Dinero
Un Golpe Judicial para el Empresario Tabacalero
Pablo Otero, conocido en el sector tabacalero como el «Señor del tabaco», ha sido objeto de un importante revés judicial. La Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), anteriormente conocida como AFIP, ha presentado una denuncia en su contra por presunto lavado de dinero. Este caso ha sido asignado al juzgado dirigido por María Servini, quien ahora debe determinar si procede con la investigación sobre el propietario de Tabacalera Sarandí.
Otero es un empresario controvertido que ha acumulado múltiples denuncias a lo largo de su carrera y que logró expandir su influencia en la industria del tabaco mediante tácticas para evadir impuestos. Durante un tiempo, se benefició de medidas cautelares que le permitieron evitar pagos tributarios; sin embargo, esta estrategia se vio afectada el año pasado cuando la Corte Suprema le ordenó regularizar su situación fiscal.
Irregularidades Detectadas en las Ventas
La denuncia presentada por ARCA se basa en un exhaustivo informe elaborado por la División de Fiscalización Externa dentro de la Dirección General de Grandes Contribuyentes. Esta división llevó a cabo una investigación sobre las ventas realizadas por Tabacalera Sarandí, específicamente relacionadas con marcas como Red Point, West, Kiel y Master.
Durante este proceso fiscalizador se identificaron diversas irregularidades que sugieren actividades vinculadas al lavado de activos. Según los hallazgos documentados entre 2021 y 2023, otero y su empresa habrían vendido cigarrillos valorados en más de $33.632 millones a 23 distribuidores mayoristas con perfiles fiscales altamente irregulares.
Los compradores involucrados no contaban con capacidad operativa real y revendían los productos a consumidores finales también irregulares. Además, emitían facturas cuyos precios eran casi idénticos a los costos originales; esto generó sospechas sobre una posible simulación comercial debido a la baja rentabilidad aparente.
Entre las anomalías detectadas también figura que estas empresas no registraban pagos tributarios ni mantenían acreditaciones bancarias mínimas; sus transacciones eran realizadas principalmente mediante depósitos o efectivo, lo cual dificultaba rastrear el origen del dinero involucrado.
Un Contexto Judicial Complejo
La ARCA sostiene que estas 23 empresas actuaban como «usinas» facilitadoras para transferir fondos desde círculos informales hacia estructuras formales. La falta documentación suficiente para justificar los orígenes financieros utilizados por estos distribuidores impide establecer una adecuada trazabilidad del capital involucrado en las transacciones comerciales con Otero.Este nuevo escándalo no es el único problema legal al que enfrenta Otero; actualmente está bajo investigación judicial en Mar del Plata debido a acusaciones relacionadas con falsificación de estampillas e venta ilegalde cigarrillos utilizando documentos apócrifos—una maniobra destinada aparentemente a evadir impuestos correspondientes.
El juez federal Santiago Inchausti lleva este expediente iniciado desde 2019 tras otra intervención similar realizada por AFIP. En esa ocasión se descubrió que varios kioscos ubicados en zonas costeras vendían cigarrillos falsificados provenientes tanto de Bronway (PIER y Dolchester) como también productos fabricados por Tabacalera Sarandí (Red point).Uno particular local incluso tenía suficiente stock para abastecer gran parte del área metropolitana marplatense e iba más allá al proveer productos hasta Tandil.
Ascenso Rápido: De Pyme a Gigante del mercado
Otero comenzó su ascenso dentro del sector tabacalero alrededor del año 2018 cuando dejó deliberadamente de pagar un impuesto mínimo establecido durante la administración presidencial anterior liderada por Mauricio Macri—un tributo considerado inconstitucional según sus argumentos legales donde alegaba ser una pyme afectada desproporcionadamente dado que sus precios eran inferiores comparativamente hablando frente otras marcas reconocidas pero enfrentaba cargas impositivas superiores al costo real unitario cada paquete vendido .
Gracias a esta estrategia evasiva implementada inicialmente ,Tabacalera Sarandí logró crecer exponencialmente ganando cuota significativa dentro mercado nacional pasando desde apenas un modesto 5 ,6 % registrado durante año 2016 hasta alcanzar asombroso porcentaje aproximado38 ,4 %en presente año2023 según análisis realizado consultora ABECEB .Con estos antecedentes recientes sumándose ya complejidad existente entorno figura empresarial Pablo Otero queda claro cómo continúa siendo objeto atención mediática mientras enfrenta desafíos legales significativos relacionados directamente actividad económica desarrollada.