La Relación Secreta entre Perón y Pinochet: Un Análisis de la Venta de Armas
Un Acuerdo Controversial
A pesar de su admiración por las «formaciones especiales» vinculadas a Montoneros y su coqueteo con ideologías de izquierda, Juan e Isabel Perón, durante su mandato en Argentina, llevaron a cabo una transacción secreta que involucró la venta de casi 3.5 millones de dólares en armamento a la dictadura del general Augusto Pinochet en chile. este acuerdo ha sido revelado recientemente gracias a los decretos secretos desclasificados por el gobierno actual.
las entregas incluyeron miles de proyectiles para fusiles FAL,2,000 pistolas ametralladoras PAM y 6,000 pistolas Browning calibre 9 mm. Los decretos que autorizaron estas operaciones fueron el N° 382 (1973) y el N° 1140 (1974), lo que equivale hoy a aproximadamente 24 millones de dólares.
La primera transacción se realizó el 26 de noviembre de 1973, seis meses antes del encuentro histórico entre perón y Pinochet en la base aérea Morón. La segunda entrega tuvo lugar en octubre del año siguiente, cinco meses después del fallecimiento del líder justicialista.
Contexto Político y Estrategia Militar
El historiador Rosendo Fraga explicó que estas ventas eran coherentes con la estrategia política adoptada por Perón ante un panorama regional marcado por regímenes autoritarios emergentes tras los avances guerrilleros. De hecho, había enviado un representante especial para establecer contacto con Pinochet poco después del golpe militar chileno.
Fraga también mencionó un acta secreta fechada el 24 de septiembre de 1973 emitida por la junta militar chilena que confirmaba “la presencia oficial” argentina como apoyo material al nuevo régimen chileno. Esto indica que apenas días después del golpe contra Salvador Allende, ya existía una colaboración tácita entre ambos gobiernos.
Perón había declarado públicamente sobre la caída Allende como un cierre crucial para las guerrillas argentinas; ordenando así su represión total. Este cambio hacia posturas más conservadoras se evidenció durante eventos significativos como la masacre de Ezeiza en junio de ese mismo año.
Reacciones Internas y críticas Externas
Mientras tanto, mientras Perón recibía a Pinochet vestido con uniforme militar en Morón, diversas manifestaciones se organizaban contra esta visita en Buenos Aires. Grupos opositores al régimen chileno expresaron su rechazo abiertamente; figuras destacadas como Rodolfo Ortega Peña participaron activamente en estas protestas.
pinochet había comenzado una represión brutal contra sus opositores políticos tras derrocar a Allende; este periodo dejó un saldo trágico: más de tres mil asesinatos documentados y miles desaparecidos bajo su régimen represivo.Miguel Unamuno fue uno más entre quienes criticaron abiertamente esta relación diplomática; incluso llegó a declarar al dictador chileno «persona no grata». En respuesta directa al concejal porteño dijo: “Como presidente tengo dos funciones: relaciones exteriores y defensa nacional”.los decretos secretos firmados por Perón junto con sus ministros autorizaban exportaciones significativas hacia Carabineros chilenos —el equivalente local sería Gendarmería Nacional— incluyendo armamento clave utilizado durante las represiones posteriores al golpe militar.
Implicaciones Históricas
La reciente desclasificación documental ha arrojado luz sobre aspectos previamente desconocidos acerca del apoyo argentino hacia Chile durante este periodo oscuro. Historiadores contemporáneos han señalado que aunque no hay registros claros sobre cómo se implementó esta ayuda material o si realmente fue efectiva desde Argentina hacia Chile —como lo menciona Eduardo López— sí existe evidencia suficiente para considerar estos actos dentro del contexto geopolítico tenso entre ambos países debido al auge guerrillero regional.
López enfatiza además cómo los intereses políticos pueden superar afinidades ideológicas personales; sugiriendo así que tanto Perón como Pinochet actuaron movidos principalmente por necesidades estratégicas mutuas frente a amenazas comunes derivadas desde sus respectivos contextos internos e internacionales.
este análisis revela no solo una faceta oculta pero significativa dentro las relaciones internacionales latinoamericanas sino también plantea interrogantes sobre hasta qué punto los líderes pueden comprometer principios éticos ante situaciones políticas complejas.
Informe elaborado por Raimundo Döll