Chile se prepara para elegir a su próximo presidente en un clima de descontento social
Este domingo,los ciudadanos chilenos acudirán a las urnas para decidir quién liderará el país durante los próximos cuatro años. Esta elección presidencial es histórica, ya que es la primera con voto obligatorio desde el fin de la dictadura de Augusto Pinochet. En medio de un ambiente marcado por el descontento social y la frustración hacia gobiernos anteriores que prometieron cambios sin cumplir las expectativas,muchos votantes optarán por lo que consideran «el mal menor».
Candidatos en contienda: Jara y Kast
La contienda electoral se centra entre Jeannette Jara, candidata oficialista y ex ministra del Trabajo bajo el gobierno de Gabriel Boric, y José Antonio Kast, representante de la derecha conservadora.En la primera vuelta celebrada el 16 de noviembre, Jara obtuvo un 26.8% de los votos frente al 23.9% alcanzado por Kast; sin embargo, las tendencias actuales sugieren una inclinación favorable hacia este último.
Kast ha recibido apoyo adicional tras sumar a su causa a otros dos líderes derechistas que participaron en la primera vuelta: Evelyn matthei y Johannes Kaiser. Esto podría consolidar su base electoral hasta alcanzar o superar el 50%. Además, existe incertidumbre sobre cómo se comportarán los votantes del populista Franco parisi —quien logró un 19.7%— después de haber instado a votar nulo o blanco como rechazo a ambos candidatos.
Un contexto marcado por la protesta
El voto hacia Parisi ha sido interpretado como una manifestación contra una clase política incapaz de abordar las necesidades urgentes del sector medio chileno. Gabriel Boric llegó al poder impulsado por demandas sociales surgidas durante las protestas masivas del estallido social en 2019; no obstante,sus promesas han encontrado obstáculos significativos en términos prácticos.Las expectativas generadas durante su campaña chocaron con una realidad compleja donde pocos avances tangibles han sido logrados para mitigar décadas de desigualdad estructural ni mejorar servicios básicos como salud y educación pública —dos demandas centrales surgidas tras el aumento del pasaje del metro que desencadenó aquellas movilizaciones.
Roberto Munita, analista político en la Universidad Andrés Bello, señala: “El malestar social es palpable; hay un fuerte descontento tanto político como económico”. A medida que Boric perdió apoyo popular debido a expectativas no cumplidas desde su llegada al poder hace cuatro años —cuando prometió renovación— ahora Jara intenta distanciarse lo más posible del actual gobierno mientras busca posicionarse como solución ante problemas persistentes.
Propuestas económicas controversiales
En este contexto tenso surge el plan fiscal propuesto por Kast para recortar hasta $6 mil millones dólares del gasto estatal si asume la presidencia. Esta propuesta ha generado controversia durante toda su campaña electoral; sin embargo,fue especialmente criticada recientemente cuando Rodolfo Carter —ex alcalde electo senador— admitió públicamente que algunos recortes presupuestarios podrían ser necesarios pero no serían revelados debido al riesgo inmediato de provocar disturbios sociales.
Jara reaccionó rápidamente ante estas declaraciones advirtiendo sobre posibles impactos negativos en derechos sociales fundamentales si se implementan tales recortes: “Sus propuestas son clandestinas”, afirmó durante sus actividades proselitistas recientes.
Desde el comando oficialista argumentan que cualquier reducción significativa implicaría afectar programas esenciales financiados con recursos públicos como educación gratuita o pensiones universales. Estas preocupaciones fueron también expresadas previamente por Matthei quien cuestionó abiertamente viabilidad económica detrás del plan fiscal presentado por Kast.
Kast defendió posteriormente las afirmaciones realizadas por Carter asegurando tener claridad sobre sus intenciones económicas e indicando que presentará formalmente su plan gubernamental cuando asuma funciones oficiales en marzo próximo.
Llamado a la transparencia
La ministra vocera Camila Vallejo exigió claridad respecto a cómo se llevarán adelante estas propuestas electorales destacando: “Si hay ocultamiento informativo estamos poniendo en riesgo nuestra democracia”. Vallejo reiteró además palabras previas pronunciadas por Boric enfatizando que “Chile no está colapsando” sino más bien recuperándose gradualmente tras tiempos difíciles provocados anteriormente.
Con todo esto presente, será este domingo cuando los chilenos decidan quién merece su confianza para guiar al país hacia adelante mientras enfrentan desafíos económicos y sociales profundos aún latentes.
