La Historia de Sofía Garassino: Un Sueño Hecho Realidad en la Pastelería de orlando
La expresión de Sofía Garassino (29) durante una videollamada con Clarín revela un torbellino de emociones que abarca desde la alegría hasta el agotamiento. Sin embargo, lo que más resalta es su sentido de realización personal. «Estoy viviendo un sueño, no tengo motivos para quejarme, aunque ahora mismo tengo solo unas horas para terminar una torta temática de Jurassic Park para un cumpleaños que me solicitaron a última hora», comparte la talentosa pastelera desde Bari Bake house, su encantadora pastelería ubicada en Florida.
Un Viaje Emprendedor
Los días son intensos y largos para Sofía, quien es originaria de Buenos Aires y se graduó en Gastronomía por la UADE. Además, posee un posgrado en Dirección y Gestión de Pymes por la UBA. Hace apenas un año inauguró su pastelería en el corazón de Orlando y ya está comenzando a cosechar los frutos del esfuerzo invertido.
«Si miro hacia atrás, parece increíble cómo todo ha sucedido tan rápido desde agosto; sin embargo, al principio no fue nada fácil. Comprendimos rápidamente que había que arremangarse y dedicar muchas horas tanto a la producción como a promocionar nuestros productos en redes sociales. Esa era nuestra fórmula conocida para vender», explica.
Sofía habla del proceso como si fuera una experiencia compartida con su esposo Felipe Berra, ingeniero industrial quien también colabora con ella organizando logística y repartos: «Me casé este año; él trabaja en una empresa pero me ayuda mucho porque hay momentos donde simplemente no puedo manejar todo sola».
Desafíos Diarios
La joven emprendedora admite tener dificultades para delegar tareas debido a su naturaleza exigente: «Soy muy perfeccionista». Trabaja incansablemente todos los días —de lunes a lunes— abriendo las puertas a las 9 am y cerrando entre diez u once horas después. Con tres empleados bajo su mando y un alquiler mensual superior a los 3.000 dólares, reconoce las presiones financieras del negocio: «Todo tiene costo; por eso nunca me relajo».
En cuanto al estilo distintivo de sus creaciones culinarias —que incluyen brownies decorados o cupcakes personalizados— destaca cómo ha tenido que adaptarse al gusto local estadounidense: «Aquí todo gira alrededor del tamaño; cuanto más grande mejor». Describe cómo ha transformado sus diseños hacia colores vibrantes e ingredientes generosos como mantequilla de maní o chocolate.
Expansión del Negocio
A pesar del éxito inicial, sofía reconoce ser aún “novata” en el área: “este es nuestro primer año aquí”.Su objetivo es expandir Bari Bake House más allá del público latino predominante —incluyendo muchos argentinos— hacia una clientela estadounidense más amplia.
Aunque produce menos tortas comparativamente (alrededor de 30-35 semanales), cada pedido cuenta historias únicas detrás: “Recibimos solicitudes inusuales como tortas temáticas basadas en personajes Disney o incluso personalizadas con equipos deportivos”, menciona mientras recuerda haber cobrado hasta 850 dólares por uno especialmente elaborado.
Su pasión por la pastelería comenzó cuando era niña; aunque sus padres licenciados en sistemas inicialmente desaprobaron esta elección profesional. A pesar del rechazo familiar inicial —“¿De eso vas a vivir?”— perseveró e hizo cursos formales antes incluso iniciar estudios universitarios relacionados con administración empresarial.
Redes Sociales Como Estrategia Clave
Con el advenimiento de la pandemia llegó también una nueva oportunidad mediante las redes sociales; hoy cuenta con más de 175 mil seguidores en Instagram gracias al contenido constante sobre sus creaciones culinarias. Este enfoque le permitió conectar directamente con clientes potenciales e incrementar significativamente sus ventas online.
«Dedico mucho tiempo creando contenido porque aproximadamente el 80% mis ventas provienen directamente desde redes sociales», explica entusiasmada mientras detalla cómo interactúa constantemente con sus seguidores pidiendo opiniones sobre nuevos productos o diseños.
El Sábado Especial
Uno podría pensar que cada día sería igual dentro del bullicio diario pero hay algo especial reservado para los sábados cuando ofrece medialunas frescas hechas exclusivamente ese día: “Nueve entre diez compradores son argentinos”, dice orgullosa refiriéndose al éxito rotundo entre clientes locales quienes buscan ese sabor nostálgico traído desde casa bajo el lema ‘From casa with love’.
Sofía expresa amor profundo hacia Bari Bake House —el nombre elegido junto a Felipe inspirado por Bariloche— donde siente satisfacción plena trabajando rodeada por hornos humeantes y masas recién horneadas mientras observa cómo los clientes disfrutan cada bocado dentro o fuera del local.“Paso muchas horas aquí pero disfruto trabajar así intensamente porque este lugar lo abrí yo… Hay amplitud suficiente donde puedo crear sin límites”, concluye llena energía positiva ante lo prometedor futuro frente suyo tras solo un año operando exitosamente.
Consciente siempre sobre competencia feroz presente dentro mercado pastelero local asegura estar construyendo camino propio basado calidad excepcional atención personalizada brindada cada cliente buscando añadir magia especial celebraciones cotidianas convirtiéndolas memorables experiencias dulces inolvidables.