Boca Juniors: Un Análisis Tras el Mundial de Clubes
Un Regreso a Casa con Descontento
Boca Juniors ha enfrentado un nuevo examen tras su participación en el Mundial de Clubes, donde la oportunidad de conseguir su primera victoria se desvaneció. A pesar de haber logrado un empate ante Benfica y una derrota ajustada contra Bayern Múnich, la situación se tornó crítica tras el decepcionante empate contra Auckland City. Este resultado dejó al equipo sin la alegría esperada y con una calificación que no cumplió las expectativas.
El regreso a Buenos Aires,programado para la noche del jueves en un vuelo chárter,promete ser sombrío.El plantel ha sido licenciado y entrará en vacaciones hasta el 1° de julio; sin embargo, existe la posibilidad de que algunos jugadores decidan quedarse en Estados Unidos durante este período. Esta situación podría generar tensiones entre los futbolistas y el cuerpo técnico liderado por Miguel Ángel Russo.
Problemas Internos y Decisiones Difíciles
La reciente actuación del equipo ha expuesto problemas internos que han estado latentes durante meses. La llegada de Russo fue vista como una solución temporal para enfrentar los desafíos internacionales, pero ahora parece ser necesario realizar ajustes significativos dentro del plantel.
Uno de los casos más críticos es el del defensor Marcos Rojo, quien no tuvo minutos en el torneo.Su relación con Russo se deterioró después del Superclásico donde Fernando Gago fue expulsado; Rojo había declarado que no estaban «en deuda» con sus aficionados. Desde entonces, su participación ha sido limitada e incluso faltó a entrenamientos previos a partidos importantes.
La necesidad de depurar al plantel es inminente. Actualmente Boca cuenta con cuatro arqueros; Chiquito Romero podría dejar el club tras no haber jugado desde una polémica derrota ante River Plate donde intentó confrontar a un hincha.
Cambios Necesarios en la Plantilla
El caso de Frank Fabra también es preocupante: su expulsión ante Fluminense durante la final de Copa Libertadores 2023 sigue siendo recordada por los aficionados como un error crítico que marcó su ciclo en Boca. Por otro lado, Marcelo Saracchi busca salir debido a su deseo por más tiempo en cancha como titular.
Se rumorea que varios jugadores abandonaron GEODIS Park inmediatamente después del partido sin esperar al resto del equipo ni al entrenador.Exequiel Zeballos también está considerando ofertas para cambiarse y Luis Advíncula siente agotamiento emocional dentro del club.
A pesar de estos desafíos internos, hay aspectos positivos tras esta experiencia internacional: Russo ya tiene claro cuál es su alineación ideal (la misma que enfrentó a Benfica) y confía en poder competir efectivamente tanto en Clausura como Copa Argentina para asegurar un lugar vital hacia Libertadores 2026.
Mirando Hacia Adelante
Sin embargo,las dudas persisten sobre Edinson Cavani; aunque es considerado uno de los pilares del equipo,sus recientes actuaciones han generado cuestionamientos tanto entre aficionados como compañeros respecto a su condición física y rendimiento general.
En última instancia, todo dependerá ahora del liderazgo estratégico que Miguel Russo pueda ejercer sobre este grupo marcado por conflictos internos y expectativas elevadas.La tarea será ardua pero necesaria si Boca desea recuperar la estabilidad deportiva perdida recientemente.
