El Gobierno Argentino Anuncia la Eliminación de los PICT y Presenta Nuevas Líneas de Financiamiento
El pasado jueves, el gobierno argentino comunicó la eliminación definitiva de los Proyectos de Investigación Científica y Tecnológica (PICT), una línea de financiamiento que había estado congelada durante dos años. Investigadores del Conicet y diversas universidades han calificado a esta iniciativa como “el pilar” essential para la investigación en ciencia y tecnología en el país. En su lugar, se implementará el nuevo Apoyo a la Investigación Científica (AIC), que se enfocará exclusivamente en proyectos relacionados con tres áreas: salud, agroindustria, energía y minería.
Exclusiones Significativas en el Nuevo Financiamiento
La nueva propuesta excluye gran parte de las investigaciones en ciencia básica,así como aquellas vinculadas a las humanidades y ciencias sociales. Además, solo se financiarán proyectos que requieran colaboración con empresas privadas; un requisito que ya existía bajo otro programa anterior.Esta situación ha generado un descontento notable entre la comunidad científica, que ha enfrentado un desfinanciamiento sin precedentes durante los últimos dos años.
Desde el Gobierno argumentan que los subsidios PICT habían sido entregados con demoras crecientes —de hasta dos años— además de ofrecer montos considerados “irrisorios”. Sin embargo, investigadores destacados han señalado que más allá de estos retrasos, los PICT eran esenciales para mantener activo el financiamiento científico.
La Perspectiva del Sector Científico
Jorge Aliaga,físico y exdecano de la Facultad de Ciencias Exactas de la UBA,comentó sobre esta nueva partida presupuestaria: “Es una cifra considerable comparada con lo anterior; no obstante,lo anunciado implica financiar solo proyectos aplicados”. Aunque reconoce la importancia del enfoque actual hacia áreas prioritarias como salud o energía,enfatiza que esto no debería ser lo único considerado.
Al consultar sobre cómo afectará esto a disciplinas como paleontología —donde investigadores realizan hallazgos significativos— las respuestas iniciales no indicaron planes específicos para financiar este tipo de estudios. Se mencionó que algunos científicos estaban buscando alternativas asociándose con empresas mineras.
Aliaga también destacó cómo esta nueva línea deja fuera toda investigación básica —incluyendo física o química— al exigir participación empresarial en cada proyecto financiado. Este enfoque ya estaba presente bajo otros programas anteriores pero no era una condición necesaria para acceder a los PICT.
Cambios Estructurales en el Financiamiento Científico
Voceros del secretario Darío Genua afirmaron que ni siquiera organismos internacionales como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) estaban dispuestos a continuar apoyando los PICT. En cambio, bajo un nuevo contrato denominado «Programa de Innovación Federal», se destinará más dinero al AIC aunque muchos observan preocupaciones sobre su alcance limitado debido al número reducido esperado beneficiarios.
La Agencia I+D+i será responsable por administrar estos fondos; este organismo es considerado equivalente al antiguo ministerio de Ciencia y Técnica. Según información oficial proporcionada por fuentes cercanas al gobierno:
- El total destinado será hasta 10 millones dólares.
- Cada proyecto podrá recibir hasta 200 mil dólares.
- La Agencia cubrirá hasta un 80% del costo total mientras que beneficiarios deberán aportar un 20%.
Con base en estas cifras estimadas por Aliaga —suponiendo promedios más conservadores— se prevé alrededor cien beneficiarios frente a más mil proyectos financiados anteriormente mediante convocatorias anuales del programa PICT.
futuro Incierto para Otras Áreas del Conocimiento
Fuentes oficiales han indicado planes para lanzar otras líneas adicionales pronto; sin embargo aún no hay detalles claros sobre su contenido o alcance específico. Un documento reciente menciona intenciones futuras relacionadas con economía digital e innovación tecnológica pero deja fuera áreas críticas como ciencias sociales o básicas.
El malestar entre científicos es palpable tras eliminarse incluso líneas específicas dentro del programa PICT 2022 cuyos seleccionados llevaban casi dos años esperando financiamiento necesario para sus investigaciones aprobadas previamente por jurados competentes. Fernando Pitossi —investigador destacado— expresó su indignación comparando esta decisión con acciones «de facto» e indicando claramente: “Este es el certificado definitivo contra la investigación científica”.
En resumen: mientras Argentina busca redefinir sus prioridades científicas ante desafíos económicos persistentes queda claro que muchas disciplinas fundamentales están siendo relegadas ante nuevas exigencias financieras impuestas desde arriba.
