Teenage Fanclub: Un Viaje Musical a Través del Tiempo
La llegada de Teenage Fanclub a Argentina
Las melodías de los escoceses Teenage Fanclub, descritas alguna vez por el novelista británico Nick Hornby como «canciones como soles», resonaron por primera vez en Argentina durante la reciente edición del festival Primavera Sound. Aunque este año el evento no se llevó a cabo en su totalidad,la banda ha logrado dejar su huella en el país con un espectáculo que capturó la esencia de su legado musical.
En una fría noche invernal en Buenos Aires, cada uno de los cinco integrantes se acercó al micrófono, brindando un sonido cálido y eficiente que desafiaba las exigencias del tiempo y sus propias trayectorias.Las composiciones de Teenage Fanclub,mayormente creadas durante los años 90,poseen una atemporalidad notable que sigue resonando con fuerza.
Un legado musical significativo
Norman Blake, cantante y guitarrista principal de la banda escocesa, lideró anoche el espectáculo en ART Media. A menudo comparados con gigantes del rock como Nirvana y Oasis —bandas que definieron toda una década— es interesante notar cómo Teenage Fanclub optó por seguir un camino más clásico tras lanzar su cuarto álbum «Grand Prix» (1995),evitando así innovaciones radicales.
A pesar de estar cerca del éxito comercial cuando sus discos fueron lanzados bajo el sello multinacional Geffen Records —en particular cuando «Bandwagonesque» compitió directamente con «Nevermind»— nunca lograron alcanzar la misma notoriedad. Kurt Cobain admiraba abiertamente a sus colegas escoceses e incluso compartieron escenario ocasionalmente. Noel Gallagher también expresó elogios hacia ellos años después; sin embargo, Teenage Fanclub no buscó ser parte del bullicio mediático ni generar controversias para atraer atención.
La esencia del power pop
La música de Teenage Fanclub se basa en lo que podría considerarse las cuatro “B” fundamentales del pop clásico: Beatles, Byrds, Beach Boys y Big Star. Como representantes escoceses dentro este género tan característico podríamos añadir también a Badfinger; un grupo pionero cuyo recorrido fue breve pero impactante gracias al respaldo inicial de The Beatles.
El concierto fue fluido y equilibrado; comenzaron interpretando “tired of Being Alone”, tema extraído de su más reciente álbum «Nothing Lasts forever» (2023).Con una actitud amable pero sin excesos dramáticos, presentaron una lista variada que sorprendió al público argentino cuando todos corearon juntos una parte instrumental muy reconocible: “Neil Jung”, donde jugaron ingeniosamente reemplazando fonéticamente el apellido Young por Jung.
El cierre perfecto
Para finalizar la velada ofrecieron un bis especial: “Everything Flows”, uno de los sencillos más emblemáticos extraídos de su primer disco «A Catholic Education». Este tema encapsula lo que muchos podrían denominar “zen rock”, reflejando esa mezcla sublime entre confusión juvenil y madurez artística. En él Blake canta sobre incertidumbres existenciales: “Nunca sabré hacia dónde fluir/ establezco un rumbo que no conozco”.
Así concluyó esta primera presentación ante el público argentino; irónicamente cerrando con su primer sencillo como si todo lo aprendido sobre composición musical hubiera sido simplemente un proceso continuo hacia atrás o quizás hacia adelante en busca constante de nuevas melodías significativas.
Teenage Fanclub ha demostrado ser mucho más que solo otra banda contemporánea; son portadores genuinos de un sonido nostálgico pero fresco capaz aún hoy día conectar profundamente con audiencias alrededor del mundo.
