Racing enfrenta una nueva derrota en casa: un análisis del partido contra Estudiantes
La reciente caída de Racing en el Cilindro ha dejado a los aficionados con un sabor amargo, marcado por silbidos y descontento. Este resultado se suma a una racha negativa que ha puesto en evidencia las debilidades del equipo, que anteriormente lograba imponerse sobre sus rivales. En contraste con su pasado exitoso, el equipo ahora parece carecer de la contundencia necesaria y muestra dificultades para reaccionar ante situaciones adversas. La falta de efectividad es palpable,incluso Adrián Martínez no logra brillar como antes al ingresar al área rival. Con importantes compromisos a la vista, como los duelos de la Copa Argentina y Libertadores, así como el clásico contra Boca Juniors, los hinchas se marcharon preocupados por el rumbo del equipo.
Un partido marcado por errores
Estudiantes capitalizó dos errores no forzados para llevarse la victoria gracias a un goleador certero: Guido Carrillo. El delantero aprovechó una oportunidad clara frente al arquero Facundo Cambeses y tras recibir numerosas críticas previas, Eduardo Domínguez comienza a encontrar nuevamente el camino hacia el triunfo.
El primer tiempo fue escaso en emociones; ambos equipos parecían contagiados por la falta de goles que ha caracterizado varios encuentros recientes. A pesar de mostrar intensidad en su juego, tanto Racing como Estudiantes carecieron de claridad para concretar sus oportunidades debido al ritmo frenético del partido.
Racing mantuvo su habitual formación 3-4-3 pero tuvo que realizar ajustes obligatorios debido a la lesión de Santiago Solari. Gustavo Costas optó por incluir al joven Ramiro Degregorio en el extremo derecho y también alineó a Gastón Martirena en esa posición. A pesar de intentar profundizar con desbordes desde las bandas mediante Duvan Vergara y Gabriel Rojas, les faltó precisión para finalizar las jugadas.
Las mejores ocasiones llegaron con un disparo bloqueado del colombiano Muslera y dos cabezazos fallidos: uno de Santiago Sosa tras un centro pasado y otro más que terminó entre las manos del arquero uruguayo.
Estrategia defensiva efectiva
Por su parte, Estudiantes adoptó una estrategia más cautelosa comparada con su anterior encuentro ante Huracán; implementaron un 4-1-4-1 donde Santiago Ascacibar actuaba como eje central mientras Carrillo lideraba el ataque. Aunque intentaron jugar principalmente por las bandas, tanto Tiago Palacios como Edwuin Cetré tuvieron que esforzarse considerablemente para contener los embates locales sin generar demasiado peligro real frente al arco rival.
Al final del primer tiempo se evidenció cierta tensión dentro del plantel racinguista cuando Sosa y Vergara intercambiaron empujones; esto reflejó claramente la frustración acumulada dentro del equipo ante una actuación poco convincente hasta ese momento.
Un segundo tiempo lleno de complicaciones
El segundo tiempo trajo consigo cambios significativos cuando Bruno Zuculini sufrió una lesión temprana; Richard Sánchez ingresó pero cometió un error crucial al perder rápidamente la posesión ante Cetré. El centro posterior permitió que Carrillo anotara con un potente remate cruzado imposible para Cambeses.
Con esta ventaja parcial sobre Racing aturdido e incapaz de reaccionar adecuadamente ante los ataques rivales —y tras recibir otra tarjeta amarilla— Castro fue expulsado después revisarse su acción mediante VAR lo cual dejó a Estudiantes con diez hombres sobre el campo.
Aprovechando esta superioridad numérica momentánea e introduciendo nuevos delanteros como Tomás Concheny y Elías Torres —en sustitución García Basso— Costas buscó reforzar su ataque mientras Domínguez optaba por protegerse añadiendo defensores adicionales alrededor Muslera quien mostró seguridad bajo palos durante todo el encuentro.
A pesar contar con dos delanteros disponibles e intentar presionar constantemente hacia adelante durante este periodo finalizando varias jugadas peligrosas sin éxito alguno debido principalmente a decisiones erráticas tomadas cerca del área rival resultando finalmente otra derrota dolorosa para Racing cuyo futuro parece incierto no solo debido a próximos desafíos difíciles sino también porque aún persisten problemas estructurales dentro juego colectivo exhibido hasta ahora.