la Revolución del Básquet femenino en Ferro Carril Oeste: Un Título que Une Generaciones
Un Club con Historia y Futuro Brillante
El básquetbol ha sido un pilar basic en la historia de Ferro Carril Oeste, un club emblemático ubicado en Caballito. A lo largo de los años, este equipo ha destacado en las competiciones masculinas más relevantes de Argentina. Sin embargo,recientemente ha puesto un fuerte énfasis en el desarrollo del baloncesto femenino. El equipo profesional femenino se ha consolidado como uno de los más competitivos a nivel nacional, culminando la temporada 2024/25 con una destacada victoria al conquistar el título de la Liga Femenina. Este triunfo fue especialmente significativo para dos miembros del plantel: Gabriel Fernández,entrenador y figura icónica de la Generación Dorada,y su hija Julia Fernández,quien se destacó como una jugadora clave durante el campeonato.
Gabriel compartió su experiencia tras el partido decisivo contra Riachuelo de La Rioja: «Fue una experiencia maravillosa. Ha requerido mucho sacrificio porque vivimos lejos del club, en zona Sur. El viaje es largo y no siempre es fácil; sin embargo, todo valió la pena». Para él fue aún más especial poder compartir este momento con Julia: «No me lo esperaba; disfruté cada instante mientras priorizaba a ella y sus compañeras».
Un Sueño Hecho Realidad
Para Julia Fernández, quien apenas tiene 20 años, celebrar esta victoria junto a su padre representó un sueño cumplido. «Fue muy emotivo», recordó emocionada. Aunque al finalizar el partido no lloró como sus compañeras debido a la adrenalina del momento, cuando finalmente se encontraron durante la entrega de medallas fue cuando pudo liberar toda esa emoción contenida.
El camino hacia este logro comenzó a gestarse al final del Torneo Apertura 2024/25 donde ferro perdió ante El Talar en la final. Justo antes de las semifinales contra Riachuelo —donde finalmente lograron avanzar— Carlos Denegri dejó su cargo como entrenador y Gabriel asumió temporalmente para esos partidos cruciales.
«Estaba por aceptar dirigir otro equipo masculino cuando surgió esta oportunidad», explicó Gabriel sobre cómo llegó a ser parte fundamental del equipo femenino justo antes del inicio de una nueva temporada.
La Dinámica Familiar dentro del Equipo
La relación entre padre e hija dentro y fuera de la cancha ha sido clave para el éxito que han logrado juntos. Julia expresó que tenerlo como entrenador le brinda confianza: «Siempre he sentido admiración por él; tenerlo ahora dirigiéndome me ayuda mucho». Además destacó cómo Gabriel aportó profesionalismo al grupo: “Sus entrenamientos son intensos; nos enseñó que ‘juegan como entrenan’, lo cual elevó nuestro nivel tanto técnica como mentalmente”.Gabriel también reflexionó sobre su estilo como entrenador: “Soy muy comprometido e intenso”, admitió entre risas mientras recordaba cómo algunas jugadoras bromeaban sobre ver repetidos videos tácticos varias veces durante las semanas previas a los partidos.
Una Pasión Heredada
La pasión por el básquetbol parece estar incrustada en los genes familiares Fernández. Gabriel heredó esta afición desde su infancia gracias a su padre rubén —quien también tuvo una carrera destacada— mientras que Julia siguió sus pasos desde joven jugando primero patín hasta decidirse por el baloncesto definitivamente.
Julia debutó profesionalmente con solo 17 años y rápidamente se convirtió en parte integral del seleccionado argentino juvenil participando ya en varios torneos internacionales importantes.
“Curiosamente nací justo un día antes debute mi papá con Argentina”, comentó Julia riendo sobre cómo parece estar destinada al deporte familiar desde siempre.
Mirando Hacia Adelante
En cuanto al futuro inmediato para Ferro Carril Oeste tras haber ganado nuevamente la Liga Femenina (su segundo título nacional), están listos para enfrentar nuevos desafíos internacionales incluyendo participar nuevamente en la Liga de las Américas 2025 —un torneo crucial donde competirán contra equipos fuertes— así como prepararse para otros compromisos importantes donde esperan dejar huella.
«Este año estuvo lleno desafíos pero terminó bien», concluyó Gabriel optimista respecto al futuro cercano tanto personal como deportivo junto a su hija quien también está lista para representar al seleccionado mayor argentino próximamente.
Con cada paso dado hacia adelante por parte tanto Gabriela como Julia Fernández queda claro que no solo están construyendo legados individuales sino también fortaleciendo vínculos familiares inquebrantables dentro mundo competitivo actual.
